¿Por qué no dices nada corazón?
y te empeñas en seguirlo amando
con solo mirarlo no te ha bastado
ya se ha convertido en tu obsesión.
¿Por qué te quedas callado?
palpitas con fuerza al contemplarlo
y al mundo quieres gritarlo
demente corazón chiflado.
Quieres pronunciar su apellido
y al intentarlo enmudeces
en el silencio te guareces
y todo se torna en un leve latido.
¿Amor, capricho u obstinación?
qué más da empecinado corazón
si se ha convertido en adicción
mirarlo con inmensa devoción.
Autora: Ma. Gloria Carreón Zapata.
Imagen tomada de Google.
No hay comentarios:
Publicar un comentario