Cuando la tristeza cubrió la tarde
rondando el corazón abatido;
el alma compungida zarpaba a la deriva
sollozando hastío,
la espera se hizo eterna
y se hundió en un laberinto
póstumo del hielo y la ventisca.
En ese instante, probé el esperma
dulce y amargo de la vida.
pensando en ti mi bien se me fue el vigor y hoy,
los años mozos anuncian la partida.
¿Qué es la vida?
Solo una pantomima con música y embrollos.
Mi testa encanecida se corona herida
evocando tu presencia cada día.
luctuoso rostro que vigilante y precavido
el tiempo ha consumido,
y hoy expira mi lozana piel lagrimas de la aurora
engastando el periodo autumnal.
Mi mundo de espejismos, espera adolorido
tristezas y alegrías, eso es la vida
que en medio de un gemido nos da la bienvenida
y en un ¡ay! de dolor anuncia nuestra despedida,
para luego como el vaho esparcir
nuestros sueños en el olvido.
Ma. Gloria Carreón Zapata.
Imagen del reconocido Ilustrador Alan Ayers.
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