Quiéreme como te quiero yo
con mi rostro embelesado rezando al cielo
sin mirar la Tierra sin tocar el suelo,
ámame con tus manos puestas en el corazón.
Condúceme amor más allá del firmamento,
adórame como te idolatro yo sin espacio ni tiempo.
Deléitame con tu ternura que alejen tus brazos mi amargura,
besa mis labios con premura y sé para mí toda mi fortuna.
Y de ese modo los dos sigamos cantando al amor,
cantándole a la vida con ilusión hasta perder ambos la cordura.
Y en un beso profundo unámonos los dos
porque sin tu amor alma mía, me siento perdida en esta vida.
Autora: Ma Gloria Carreón Zapata
Imagen tomada de Google
No hay comentarios:
Publicar un comentario