jueves, 15 de mayo de 2025

LA MUJER QUE LEE Y ESCRIBE.

 







La mujer que lee y escribe es un jardín secreto, donde florecen las palabras como flores silvestres, perfumando el aire con la esencia de sus sueños.  Sus ojos, dos luceros que navegan por mares de tinta, descubren en cada página un nuevo continente, un nuevo universo por explorar.  Sus manos, ágiles y delicadas, tejen con letras la urdimbre de su alma, creando tapices de emociones, de experiencias, de verdades ocultas.

Es un ave fénix renaciendo de las cenizas de cada página leída, un río caudaloso que fluye con la fuerza de sus propias palabras, esculpiendo con ellas el paisaje de su ser.  Su escritura es un canto a la libertad, un himno a la existencia, un susurro al viento que lleva sus pensamientos a rincones lejanos.  Cada palabra es una estrella fugaz, dejando tras de sí un rastro luminoso de belleza y misterio.

Ella es la luna que ilumina las noches oscuras con el resplandor de su intelecto, el sol que derrite el hielo de la indiferencia con el calor de su pasión.  Es un faro que guía a otros a través de la tempestad de la vida, ofreciendo un refugio seguro en el puerto de sus letras.  La mujer que lee y escribe es un enigma, un misterio, una fuerza indomable que transforma la oscuridad en luz, la duda en certeza, el silencio en canción.




(copyright)

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