Cisne de límpidas plumas
idealista que en tus versos
delineas mis labios tersos
mi ser de mujer perfumas.
De mi quebranto me exhumas
cuando en majestuoso vuelo
me vas brindando el consuelo
la dicha a mi vida
integras
Y a mí ser todito alegras
cuando cantas a capelo.
Cuando cantas a capelo
baladas de tu autoría
en lo que yo te leía
sentí que volaba al cielo.
¡Oh!, que divino señuelo
que como agua de fontana
encanta y lleva al nirvana
es el alma enamorada
Que seducida amparada
dicha placentera emana.
Autora: Ma. Gloria Carreón Zapata.
Imagen tomada de Google.
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