Me dices que me amas y te quedas callado
el alma se regodea se siente satisfecha
mofándose el tiempo atroz me acecha
el viento bailotea posándose a mi lado.
Virando va la vida así mismo los sueños
que abrigan el pecho de mi corazón norteño
sabiendo, estoy segura que tú eres su dueño
amo profundamente esos tus ojos trigueños.
Boyando la esperanza canta, dichosa avanza
soslayando las penas de lunas pasadas
que eternamente atrás quedaron selladas
hoy la dicha guinda de éste lapso enamorado.
Otrora jovial romántica y soñadora
bebió las mieles de tu exquisita boca
agora en el umbral del órgano te coloca
dueña de tu eternal aurora de estos versos autora.
Autora: Ma. Gloria Carreón Zapata.
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